"Pero tenía planes"
Con lo que está pasando en el mundo en estos momentos, todos estamos lidiando con viajes cancelados, cambios en el calendario escolar, ajustes en el trabajo o romances incipientes que tendrán que posponerse.
Para algunos, el COVID-19 puede significar pequeños inconvenientes, mientra que para otros puede implicar cambios en su situación laboral, así como la cancelación o postergación de una celebración o ceremonia muy esperada.
Si se comunica con cualquier ser querido en este momento, lo más probable es que esté decepcionado por algo. Entonces, ¿qué podemos hacer para ayudarnos mutuamente?
Revise sus expectativas
La decepción proviene de una desconexión entre lo que cree que va a suceder y lo que realmente está sucediendo. Una crisis sanitaria nos obliga a todos a reevaluar y restablecer nuestras expectativas. Echemos un vistazo a las expectativas que tenía antes de que el COVID-19 se convirtiera en realidad.
- ¿Cómo creía que serían las próximas semanas o meses antes del COVID-19?
- ¿Cuál es la realidad ahora?
- ¿Cómo se siente con este cambio?
Sienta sus sentimientos
Está bien sentir tristeza, decepción o enojo.
Es una reacción natural cuando sus expectativas no se cumplen. ¿Sabía que evitar los sentimientos puede más bien intensificarlos? Vea el video para obtener más información.
"Es bueno que..."
¿La gratitud parece algo tonto o imposible en este momento? Para muchas personas, sí. A gran escala, es un momento difícil para el mundo y las personas sufren de muchas maneras complejas.
Y, sin embargo, en una crisis, puede ser muy útil dirigir su atención hacia la gratitud y encontrar cosas por las que estar agradecido. ¿Qué cosas le vienen a la mente por las que pueda sentir agradecimiento en este momento? Tómese un momento para reflexionar si es necesario.
Aquí hay algunos ejemplos de cosas por las que otros están agradecidos ahora:
Sara: "Encontré al hombre que amo".
- "Tuve que cancelar mi boda ayer y la había estado planeando por más de un año. Estoy muy agradecida por mi prometido. Vamos a pasar nuestras vidas juntos, sin importar cómo lo hagamos, y me enfocaré en eso".
Tom: "Puedo trabajar desde casa".
- "Muchos amigos míos tienen trabajos que no pueden hacer en casa y están tratando de descubrir cómo llegar a fin de mes. Estoy agradecido de tener un trabajo estable y un empleador que está dispuesto a trabajar conmigo, incluso mientras mis hijos están en casa”.
Maya: "Estoy a salvo".
- Maya está lejos, en la universidad, a cientos de kilómetros de su madre. Se mudó repentinamente de su residencia universitaria cuando cerró y decidió quedarse con una amiga. Se siente insegura de viajar ahora mismo, por lo que se está quedando con la familia de su amiga hasta que la situación mejore. "Me gustaría estar en casa, pero me alegro de estar en un hogar seguro con una familia agradable que me da de comer", dice.
James: "Sé que estoy recibiendo la mejor atención".
- James está en una residencia asistida y por ahora no puede recibir visitas. "Algunas personas creen que es terrible, pero me alegro de estar lejos de los gérmenes de otras personas", dice. "Sé que el personal me cuida bien aquí, y me alegro de tener FaceTime y televisión".
Aceptar los cambios
Cuando nos llegan muchos cambios, y rápido, es posible que tengamos ganas de culpar a alguien o a algo. Nos concentramos en lo negativo y en las pérdidas. Son reales y son dolorosas. Pero aceptar las cosas que no podemos cambiar es la única forma de salir de la miseria. Aceptar no significa que le guste algo, solo significa reconocerlo como verdadero. Si lucha contra la realidad, siempre perderá.
Dado que el COVID-19 es impredecible, incluso para los expertos, todos estamos enfrentando el desafío de aceptar algo que no hemos visto antes. Sus habilidades de aceptación se pondrán a prueba. Para obtener más ayuda con la aceptación, mire este video sobre la aceptación radical.
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