Entre bebidas junto a la piscina, banquetes ilimitados y más, las vacaciones son un momento para descansar, relajarse y divertirse. Para muchas personas, eso significa dejar el bienestar en un segundo plano. Desafortunadamente, cuando se trata de su salud, lo que sucede en las vacaciones no se queda en las vacaciones.
A no ser que quiera llevarse a casa unos cuantos kilos de más como recuerdo, es importante darle la vuelta al guión típico para así cumplir con sus metas de salud mientras está de viaje. He aquí algunas formas de cambiar los pensamientos autodestructivos que a menudo nos decimos a nosotros mismos.
En vez de pensar: "¡No quiero perderme nada!"
Piense: “Hay mucha comida alrededor, así que no tengo que preocuparme por perderme nada. Puedo disfrutar lo que quiero sin comer más de lo que necesito".
- Si está en un crucero, por ejemplo, es posible que haya comida disponible durante todo el día. Si está explorando una nueva ciudad, los olores de comidas y bocadillos típicos pueden competir por su atención. Es divertido darse un gusto ocasional, pero si no quiere comer en exceso, mantenga su horario de alimentación habitual con horarios definidos para las comidas.
En vez de pensar: “¡Estoy de vacaciones! Debería darme un gusto cada vez que pueda".
Piense: "Quiero disfrutar de estas vacaciones, así que necesito energía. Le daré prioridad a la comida que mi cuerpo necesita. Así disfrutaré mucho más cuando me dé un gusto ocasional”.
- Hay espacio para extras, pero no necesariamente en cada comida. Incluso estando de vacaciones, disfrute de las golosinas y los bocadillos como ocasiones especiales. Estructure la mayoría de sus comidas en torno al concepto de un plato balanceado, tal y como lo haría en casa. Haga espacio para esos gustos que disfrutará.
En vez de pensar: "¡Las bebidas no cuentan cuando se está de vacaciones!"
Piense: "Disfrutaré de una copa o dos para poder divertirme, sentirme bien y mantenerme en el buen camino".
- El alcohol puede hacernos más propensos a comer sin pensar. Si bebe, hágalo de forma moderada, calcule una bebida en el caso de las las mujeres y hasta dos bebidas en el caso de los hombres, al día. Evite las bebidas azucaradas y los cócteles que contienen muchas calorías. En su lugar, elija vino, cerveza ligera o cócteles preparados con refrescos dietéticos o agua carbonatada. Alterne cada bebida alcohólica con un vaso de agua o agua carbonatada para mantenerse fresco e hidratado.
En vez de pensar: “Las porciones son enormes. ¡Puedo comer mucho!"
Piense: “Hay mucha comida y seguirá habiendo mucha. No me moriré de hambre, puedo dejar de comer cuando sienta saciedad".
- Las porciones de los restaurantes tienden a ser mucho más grandes de lo que usted se hubiera servido en su casa. Sea consciente de las porciones. Coma para satisfacer su hambre, no para limpiar el plato. ¡Habrá muchas más oportunidades de disfrutar de la comida por el resto de su vida!
En lugar de pensar: "Es demasiado difícil mantener hábitos saludables cuando estoy fuera de casa".
Piense: “Hay mucho que puedo hacer para mantener mis hábitos saludables mientras estoy de viaje. Incluso mantener un solo hábito saludable es mejor que nada".
- Encuentre formas de mantener las rutinas saludables que tiene en casa. ¿Se ejercita por la mañana? Aproveche el gimnasio del hotel o salga a correr antes de empezar el día. ¿Tal vez toma mucha agua todos los días? Lleve una botella de agua recargable y continúe con el buen trabajo.
En lugar de pensar: "¡Todo se ve delicioso! ¡Tengo que probarlo todo!"
Piense: “Puedo elegir lo que más me gusta y saltarme el resto”.
- Use la regla 80/20. El 80% del tiempo, elija los alimentos más saludables que pueda. Durante el otro 20% del tiempo, disfrute de algunos gustos, como postres y bebidas alcohólicas, con moderación. Esto deja espacio para los gustos que realmente disfruta, pero manteniendo el equilibrio en general. Recuerde, se trata de progresar, no de hacer las cosas a la perfección.
Pensar en el bienestar cuando viaja no significa abandonar la diversión. Hay mucho espacio para disfrutar de comidas y bebidas deliciosas, siempre y cuando tome buenas decisiones en el camino. ¡Buen viaje!
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