¿Alguien le ha dicho alguna vez que “mantenga la mente abierta” o “piense en positivo”? Son más que simples frases. Su mentalidad puede tener un gran impacto en sus posibilidades de éxito cuando se trata de superar desafíos.
Los términos "mentalidad de crecimiento" y "mentalidad fija" se refieren a cómo las personas ven sus habilidades para lograr sus objetivos. Una persona con una mentalidad fija cree que las habilidades básicas, la inteligencia, las habilidades y el talento son cosas con las que nace. Alguien con una mentalidad de crecimiento cree que puede lograr el éxito si aprende nuevas habilidades y trabaja duro.
Con una mentalidad fija, los desafíos pueden parecer:
- "Trabajo demasiado. No tengo tiempo para hacer ejercicio".
- “Soy naturalmente una persona estresada. Es más difícil para mí relajarme".
- "Siempre he sido un comedor poco saludable".
Mientras que una mentalidad de crecimiento suena más a:
- "Si pudiera aprender a convertir el ejercicio en un hábito, creo que puedo hacer más ejercicio".
- “Trabajo muy duro para controlar mi estrés. Tal vez haya algo más que pueda probar que lo haga más fácil".
- "Necesito ayuda para aprender a cocinar comidas saludables que realmente sepan bien".
¿Ha sido marginado por pensamientos negativos que le dicen que no puede alcanzar sus metas? Entonces puede que sea el momento de restablecer su mente. Las buenas noticias sobre las mentalidades: es posible cambiar su mentalidad de un estado fijo a una mentalidad de crecimiento. De esa manera, no se limita a sí mismo ni a sus habilidades.
Aquí hay algunos pasos que puede seguir para desarrollar su mentalidad de crecimiento.
- Vea el fracaso como una oportunidad. Cuando las cosas no salgan como lo desea, trate de pensar en ello como una experiencia de aprendizaje.
- Cree conciencia de sí mismo. Trate de comprender sus fortalezas y debilidades. No es necesario ser negativo. Simplemente tome una vista de panorama general para que pueda concentrarse en los lugares donde se necesita crecimiento.
- Adopte el aprendizaje permanente. Cada paso a lo largo de su viaje hacia la salud es una oportunidad para aprender cómo mejorar la próxima vez.
- Acepte los desafíos. El cambio es difícil. Cada obstáculo que cruce le ayudará a desarrollar nuevas habilidades y estrategias.
- Celebre las victorias. ¡No existen los pequeños éxitos! Cualquier cambio, aprendizaje o pensamiento positivo merece atención. Adopte el mantra: "Progreso, no perfección".
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