Fumar puede dañar casi todos los tejidos y órganos del cuerpo, incluidos el corazón y los vasos sanguíneos. Fumar también perjudica a los no fumadores que están expuestos al humo de segunda mano. Si fuma, tiene buenas razones para preocuparse por los efectos en su salud, la de sus seres queridos y otras personas. Decidir dejar de fumar es un gran paso y seguir adelante es igualmente importante. Dejar de fumar no es fácil, ¡pero es posible!
¿Es demasiado tarde para dejar de fumar?
Nunca es demasiado tarde para dejar de fumar. No importa la cantidad o cuánto tiempo haya fumado, cuando deja de fumar, su riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular comienza a disminuir. En el año siguiente a dejar de fumar, su exceso de riesgo de enfermedad coronaria se reduce en un 50 % Después de 15 años, su riesgo es tan bajo como el de alguien que nunca ha fumado. Si bien es posible que desee un cigarrillo después de dejar de fumar, la mayoría de las personas sienten que dejar de fumar es lo más positivo que han hecho por ellos mismos.
¿Cómo lo dejo?
Es más probable que deje la nicotina para siempre si se prepara para dos cosas: su último uso y los antojos, impulsos y sentimientos que se producen al dejar de fumar.
Piense en dejar de fumar en cinco pasos:
1. Establezca una fecha para dejar de fumar. Elija una fecha dentro de los próximos treinta días en la que dejará la nicotina. Dígale a sus familiares y amigos que más probablemente apoyarán sus esfuerzos.
2. Elija un método para dejarlo. Hay varias formas de dejar de fumar. Algunas incluyen:
- Dejarlo de una vez el día de dejar de fumar.
- Reducir su uso de nicotina cada día hasta que deje de hacerlo por completo.
3. Decida qué necesita para dejar de fumar. El uso de un medicamento o terapia de reemplazo de nicotina (NRT) combinados con asesoramiento u orientación aumenta drásticamente sus posibilidades de lograr dejar de fumar. Hable con su proveedor de atención médica sobre qué medicamento es mejor para usted y para que le indique cómo usarlo. Estos pueden incluir sustitutos de nicotina (chicle, parche, pastilla, aerosol o inhalador) o medicamentos de receta (como bupropión o vareniclina). También puede pedir que lo refieran a un programa para dejar de fumar.
4. Anticípese a situaciones de riesgo. Deshágase de todos los cigarrillos, fósforos, encendedores, vaporizadores, cigarrillos electrónicos y ceniceros de su casa. Encuentre sustitutos saludables. Vaya a dar un paseo. Lleve con usted chicle o mentas sin azúcar. Masque zanahorias o palitos de apio. ¿Existe alguna situación que crea que podría tentarlo a fumar? Planifique con anticipación para que pueda evitarla o enfrentarla sin nicotina.
5. Deje de fumar el día de dejar de fumar. Los antojos pueden surgir, pero pasarán. Las ganas de fumar generalmente duran sólo hasta 5 minutos. Planee tener algo con lo que ocupar su mente o su cuerpo hasta que pase el impulso. A medida que tenga más experiencia en dejar de fumar, los antojos se volverán menos intensos.
¿Qué pasa si vuelvo a fumar después de haberlo dejado?
Los resbalones pueden ocurrir. Puede ser tentador darle una probada al cigarrillo de un amigo, o encontrar un viejo vaporizador y usarlo.
Un resbalón es diferente a una recaída. Los resbalones son un único bache en el camino. Las recaídas ocurren cuando las personas vuelven a fumar con regularidad. Pero adivine qué: ¡ninguno de estos significa que haya fallado!
Si recae, inténtelo de nuevo. Comience su plan de nuevo tan pronto como pueda, esta vez sabiendo lo que causó que volviera a fumar.
Si tuvo un resbalón, recupérese con las tres A:
- Ajuste su rutina.No se castigue ni se culpe. Simplemente reconozca que algo no funcionó y cambie las cosas para que pueda prevenir lo que sea que haya causado ese resbalón.
- Evite situaciones de alto riesgo. Hay algunas situaciones que tienen más probabilidades de provocar un resbalón o una recaída. El estrés. El alcohol. Estar cerca de otros fumadores. Trate de evitar este tipo de situaciones por un tiempo hasta que se sienta más seguro de dejar de fumar.
- Alternativas. ¡Encuentre algo más que hacer que no sea fumar! Mantenga sus manos ocupadas tejiendo, trabajando con madera, escribiendo, haciendo garabatos, tareas domésticas, cocinando, etc. Mantenga su boca ocupada masticando un palillo de dientes o incluso chupando una rama de canela. Y mantenga su mente ocupada leyendo, viendo un video divertido en su teléfono, llamando a un amigo, aprendiendo algo nuevo, o cualquier otra cosa que le parezca interesante.
¿Qué puedo esperar después de dejar de fumar?
- Los sentidos del olfato y gusto regresan.
- Su tos de fumador desaparecerá.
- Respirará mucho mejor.
- Se liberará del desorden, el olor y las quemaduras en la ropa.
- Aumentará sus probabilidades de vivir más tiempo y reducirá su riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.
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