Recibir un diagnóstico de hipertensión o presión arterial alta puede provocar algo de temor. Es normal sentir confusión y hacerse preguntas. "¿Qué significa esto para mí? ¿Por qué me sucede esto?". Sepa que la presión arterial alta es muy común y muy tratable. Un diagnóstico de presión arterial alta no tiene por qué impedirle disfrutar de una vida larga y plena. Respondamos algunas preguntas comunes y frecuentes que cualquier persona puede hacerse tras recibir un diagnóstico de estas características.
¿Cómo afecta esto al resto de mi cuerpo?
¿Por qué tengo presión arterial alta?
¿Qué opciones de tratamiento tengo?
¿Cuánto tiempo estaré tomando medicamentos?
¿Qué es la presión arterial alta?
A la presión arterial alta se la conoce como "hipertensión". Se produce cuando la fuerza con la que la sangre circula por los vasos sanguíneos es demasiado elevada. Esto significa que el corazón tiene que trabajar más para hacer su trabajo. Cuando se toma la presión arterial, hay dos números en los valores. El número superior se llama presión sistólica y se refiere a la presión en los vasos sanguíneos cuando el corazón se contrae. El número inferior es la presión diastólica, que se refiere a la presión en los vasos sanguíneos cuando el corazón se relaja. La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mm Hg). Si sus valores de presión arterial suelen ser superiores a 130/80 mm Hg, es posible que se le diagnostique hipertensión. Compartimos algunos recursos útiles donde se explica qué es la hipertensión y cómo entender los valores al tomar la presión arterial:
- Una guía integral para la hipertensión
- Comprender los valores de su presión arterial
- ¿Qué es la presión arterial alta?
¿Por qué no tengo síntomas?
A pesar de que la presión arterial alta puede afectar de distintas maneras al cuerpo, la mayoría de las personas nunca tienen síntomas. Otras presentan problemas que no parecen estar relacionados, pero que pueden ser causados por la presión arterial alta. A veces, por ejemplo, las personas sufren dolores de cabeza más intensos si tienen presión arterial alta. Debido a que los síntomas no siempre son evidentes, es importante chequear la presión arterial periódicamente. Algunas personas pueden presentar los siguientes síntomas:
- Dificultad para respirar
- Dolor de pecho
- Mareos
- Dolor de cabeza y migraña
- Ritmo cardíaco anormal
- Náuseas y vómitos
- Ansiedad
- Alteraciones visuales
¿Debería preocuparme?
La presión arterial alta es extremadamente común y muy tratable. Aunque cuando no se trata puede ser peligrosa, es posible tenerla bajo control si respeta el plan de tratamiento. Puede minimizar los efectos negativos de la presión arterial alta si trabaja en conjunto con su proveedor para elaborar un plan de tratamiento.
La presión arterial alta se puede presentar en fases. La mayoría de las personas comienzan con una presión arterial normal o elevada. La presión arterial alta tiene tres fases: fase 1, fase 2 y crisis hipertensiva. Lea Cómo entender los números de su presión arterial para obtener más información sobre estas fases. Recuerde adoptar el hábito de chequear su presión arterial con regularidad para conocer sus propios patrones.
Una crisis hipertensiva se produce cuando la presión arterial supera los 180/120 mm Hg y se presenta dolores en el pecho, en la espalda, debilidad, entumecimiento, y dificultad para ver, hablar y respirar. Si tiene alguno de estos síntomas, llame al 911.
¿Cómo afecta esto al resto de mi cuerpo?
La presión arterial alta no tratada puede dañar las arterias con el tiempo haciéndolas menos elásticas. Esto afecta la eficiencia con la que la sangre circula por el cuerpo. Cuando diferentes órganos en todo el cuerpo reciben menos flujo sanguíneo, pueden sufrir daños, sobre todo el corazón, el cerebro y los riñones.
¿Por qué tengo presión arterial alta?
La experiencia de cada persona con la presión arterial alta varía. Es muy importante que usted hable con su proveedor de atención médica para determinar sus causas particulares. Usted y su proveedor revisarán sus antecedentes familiares y su estilo de vida para determinar las causas específicas. Las causas habituales de la presión arterial alta son las siguientes:
- Antecedentes familiares y genéticos
- estrés
- Tener sobrepeso
- Falta de ejercicio
- Consumo de cigarrillos
- Consumo de alcohol y cafeína
- Tener más de 65 años
- Dieta alta en sal, y baja en frutas y vegetales
Algunas causas de la presión arterial alta están bajo su control, pero es posible que otras no. Es importante hablar con honestidad con su proveedor médico, con el fin de determinar el plan de tratamiento que mejor se adapte a su situación.
¿Qué opciones de tratamiento tengo?
Su tratamiento dependerá de su historial médico y de las causas de la presión arterial alta. Algunas personas pueden tener que cambiar o incorporar hábitos, como dejar de fumar o hacer más ejercicio. Otras personas pueden necesitar medicamentos para ayudar a controlar la presión arterial. Hay personas que deben combinar ambos aspectos, tanto hacer cambios en su estilo de vida como tomar medicamentos.
Los ajustes en el estilo de vida pueden incluir:
- Hacer más ejercicio
- Consumir menos sal
- Controlar el estrés y cuidar la salud mental
- Beber menos alcohol
- Dejar de fumar
- Perder peso
- Comer más frutas y vegetales
- Programar un horario de sueño regular
Su guía para la salud del corazón proporciona más detalles sobre cómo comenzar a adoptar hábitos saludables para tener la presión arterial bajo control. Compartimos algunos artículos que pueden servirle para ajustar su dieta y rutina de ejercicios:
- Coma alimentos ricos en potasio para bajar la presión arterial
- Opciones bajas en sal: Selección de comida rápida
- Cómo el ejercicio ayuda a controlar la presión arterial
Hay muchos tipos de medicamentos para la presión arterial alta. Estos son algunos de los más comunes que le pueden recetar:
Diuréticos: estos medicamentos ayudan a eliminar más agua y sal del cuerpo para que la sangre pueda bombear más libremente.
Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ECA): estos medicamentos relajan los vasos sanguíneos, lo que reduce la presión arterial.
Betabloqueantes: estos medicamentos bloquean la absorción de ciertas hormonas, lo que reduce la frecuencia cardíaca y relaja los vasos sanguíneos. Esto ensancha las arterias y las venas, por lo que hay más espacio para que la sangre circule libremente.
Bloqueadores de los canales de calcio: estos medicamentos bloquean la absorción de calcio en los músculos y los vasos sanguíneos. Esto relaja el corazón y las paredes de los vasos sanguíneos, lo que permite que la sangre circule más libremente.
Algunos de estos medicamentos pueden tener efectos secundarios. Los efectos secundarios en su caso dependerán de su organismo y de la medicación que usted tome. Algunas personas nunca tienen ningún efecto secundario. Consulte con su proveedor de atención médica cómo controlar los efectos secundarios si estos ocurren. No deje de tomar sus medicamentos a menos que su proveedor se lo indique. Obtenga más información sobre cómo administrar sus medicamentos para la presión arterial con estas herramientas:
- 6 formas de administrar los medicamentos para la presión arterial alta
- Todo lo que necesita saber sobre los medicamentos para la presión arterial
- ¿Ya tomó sus medicamentos de hoy para la presión arterial?
¿Cuánto tiempo estaré tomando medicamentos?
Muchas personas siguen tomando medicamentos para la presión arterial de por vida. Otras, poco a poco dejan de necesitarlos. Siempre tome su medicamento según las indicaciones y continúe haciendo ajustes saludables en su estilo de vida. Es casi imposible saber al momento del diagnóstico si usted necesitará medicamentos de por vida. Pero respetar su rutina de chequeo de la presión arterial será de gran ayuda para mantenerla bajo control. Su proveedor de atención también puede necesitar ajustar su rutina de medicamentos para encontrar lo que le dé mejores resultados.